martes, marzo 25, 2008

LO QUE QUEDÓ DEL DOMINGO

Otra jornada teñida por la violencia y otro partido suspendido, en la anterior la violencia vino de afuera (asesinato de un joven de la caravana de Vélez cerca del estadio de San Lorenzo), pero esta vez la violencia vino de adentro, salió del pito del referí Beligoy que se mostró decidido a “arruinar” el partido entre Racing y Estudiantes y lo logró (ver columna de ayer titulada ‘Alevosía + Hipocresía’), así que sin mucho entusiasmo los invito a pasar y leer lo que nos dejó otra triste jornada del fútbol argentino donde la tabla de posiciones está llena de asteriscos por los partidos pendientes.

Un aliento “gigante”
Impresionante “el Gigante de Arroyito” para recibir a Central, estaba que “explotaba”, no me canso de decirlo: CUANTA GENTE QUE LLEVA ‘EL CANAYA’ !!!, le ganó a Banfield 2-1 luego de ir perdiendo 0-1, y no mereció la victoria, porque “el taladro” convirtió el 1º gol a los 11’ del 1º tiempo y luego no supo rematarlo, tuvo varias y las desperdició todas, luego en la 2º etapa lo empató Central con un gol de rebote producto de una salida tardía de Luchetti, y cuando faltaba muy poco para el final consiguió el 2º gol en un centro muy anunciado de la derecha que cabeceó Vizcarra en la puerta del área chica y donde ni los centrales ni Luchetti reaccionaron a tiempo; de esta manera “el canaya” se aleja de la zona de promoción y como consecuencia de esta derrota ayer “el chocho” Llop dejó de ser el técnico del “taladro”, lo despidieron así nomás, dicen que fue por dejarlo a Sanguinetti (un histórico de Banfield) en el banco.

Condenado
Así parece estar Racing, aún cuando tiene todo para ganar un partido se desconcentra y lo pierde en pocos minutos, eso es lo que le pasó frente a Estudiantes de La Plata el Sábado por la noche, porque al final de un 1º tiempo áspero y luchado, donde había habido muy pocas situaciones de gol, “la academia” encontró el gol (algo que le cuesta muchísimo) a los 41’ en una gran jugada de Matías Sánchez que eludió a 3 defensores sobre la derecha y luego envió un centro corto justo para la cabeza de Fileppi que la metió en el arco, y también tuvo su habitual cuota de mala suerte cuando el propio Fileppi a los 45’ recibió de Maxi Moralez en el área y tiró a colocar y el travesaño le dijo que no aunque mereció ser gol, y así se fueron al vestuario con “la Academia” en ventaja. Para la 2º parte Sensini metió el cambio de Galván por Piatti en Estudiantes, pero de arranque el partido seguía trabado y no parecía que “el pincha” tuviera muchas ganas de ir a empatarlo, pero lo consiguió a los 13’30” en un contragolpe que nació en un balón perdido por Racing sobre la derecha de su ataque, la pelota salió rápida de izquierda a derecha y metieron el centro al 1º palo que Maggiolo dejó pasar, no llegó ningún defensor académico a rechazar, lo pasó también a Hilario Navarro y por el 2º palo entró solito Galván y con el arco vacío la metió en la red, era el 1-1 cuando nada lo hacía suponer, pero ni siquiera tuvo tiempo Racing de asimilar el golpe cuando a los 16’ en otro avance estudiantil, esta vez por la izquierda, Luguercio sobre la izquierda metió un amague y enganchó y después metió el centro que le cayó a Lázzaro que solito delante del arco la cabeceó al gol, Estudiantes se ponía 2-1 arriba y “el cilindro” enmudeció, a partir de aquí llegó “el show de Beligoy” con 3 expulsiones insólitas y desnaturalizó el partido, entonces el público reaccionó violentamente y provocó su suspensión (la actuación del árbitro se explica con lujo de detalles en la columna de ayer titulada Alevosía + Hipocresía), según Beligoy por falta de garantías, aunque en realidad el único que no dio garantías fue el árbitro.

Se le cayó “la careta”
Les veníamos diciendo que Vélez era puntero pero que no había jugado bien en los 5 partidos que había jugado hasta aquí, y con el 1º rival de categoría que tuvo que enfrentarse perdió sin atenuantes, y “las gallinas” encima le hicieron precio, porque en la 1º parte los pudieron golear, iban apenas 10’ y ya River estaba 2-0 (lindos goles de A. Sánchez -con un derechazo de afuera del área- y de Falcao –picó solo en una contra y definió con categoría-) y no paró de atacar, y convirtieron a Montoya en el salvador de la goleada, porque River dominó a voluntad y Vélez nunca supo donde estaba parado, tanto que en apenas media hora de partido Tocalli (que se desgañitaba desde la raya de cal) tuvo que meter 1 cambio para tratar de frenar “el baile” que se estaban “comiendo” en el medio. En la 2º parte River se aflojó un poco y “el fortín” tuvo 3 chances de gol (todas por errores defensivos del ‘ex millo’) en los primeros 15’ que no pudo concretar (después volvió a la normalidad), 2 bien tapadas por JP Carrizo y 1 que pegó en el travesaño, donde quedó demostrado de que “las gallinas” son flojitas en defensa; Vélez hizo poco y nada, en realidad jugó igual que siempre, y se vió desbordado por el toque y la velocidad de Rosales, A. Sánchez, Buonanotte y Falcao, que en la 1º etapa “les pintaron la cara”.
En las tribunas de Vélez había una bandera que decía: “Periodistas mentirosos e hipócritas”, referidas a la muerte del chico Emmanuel en el Bajo Flores, a la que suscribo plenamente.

Hundido
Naufragó “el rojo” en San Juan donde fue avasallado por el humilde San Martín, fue 2-0 pero pudieron ser 2 goles más tranquilamente, uno lo invalidó insólitamente el árbitro Pompei cuando en un tiro libre ejecutado por Recalde cobró un offside pasivo, sí: de esos que no se cobran más, y bueno: EL ROJO ES UNO DE LOS EQUIPOS DEL JEFE !!!, el partido se terminó en la 1º etapa, apenas comenzado el match consiguió el 1º gol Bravo, pero Independiente, aún en desventaja, nunca mostró actitud ni la fibra necesaria para ir a pelear el resultado (tanto que cuesta encontrar jugadas de peligro a favor del “rojo” en este partido), luego aumentó “el torpe” Tonelotto de cabeza, y a pesar de la ventaja siguió siendo San Martín el que buscaba. El 1º tiempo terminó con los sanjuaninos 2-0 arriba, y ya en la 2º etapa “el santo” se retrasó pero “el rojo” siguió indolente (con Montenegro como abanderado) como si fuera ganando y terminó entregándose sin luchar (Troglio como siempre mandó al pibe “pato” Rodríguez a la cancha a ver sí podía conseguir un “milagro” que nunca llegó), mientras que los locales pudieron aumentar en un par de contragolpes. Como corolario de la dura derrota (que prácticamente lo elimina de la lucha por el título) ayer los dirigentes despidieron al técnico Troglio, bueno: por lo menos Independiente se trajo algo positivo de San Juan.

Un saludo cordial,

HORACE de la BOCA

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